(Publicado en la Carta Semanal 563)
Hay una aceleración sin precedentes de la descomposición de todo el sistema de dominación del imperialismo. Esto se manifiesta a la vez en la amenaza inminente de derrumbamiento del sistema financiero mundial, en la extensión brutal a Europa de una guerra que desde hace decenios causaba estragos en el Oriente Medio y en África, y en el desplazamiento de decenas de millones de hombres, mujeres y niños, expulsados de sus hogares por la miseria y la guerra.