(publicado en la Carta Semanal 506)
Una apuesta arriesgada del capital financiero
El primer ministro del gobierno de coalición Nueva Democracia/Pasok lanzó el órdago adelantando dos meses la elección del Presidente de la República. En Grecia esa elección no es directa, se realiza por medio del voto del Parlamento. El candidato debe conseguir dos tercios de los 300 diputados en las primeras votaciones (200) o tres quintos en la tercera y última votación (180). Ninguna de las tres votaciones dieron la mayoría requerida, lo que llevó a convocar el 30 de diciembre elecciones legislativas anticipadas para el 25 de enero. Samarás, bajo las presiones de las instituciones de la UE y del capital financiero, quería forzar un “acuerdo” con la oposición, particularmente con Syriza (71 diputados y al que las encuestas dan probable ganador en las elecciones).