(publicado en la Carta Semanal 436)
¡ABAJO LA AMENAZA DE AGRESIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS Y SUS COMPARSAS CONTRA SIRIA!
¡Unidad para impedir que utilicen bases e instalacionesen el Estado español!
Obama ha anunciado que los Estados Unidos van a descargar su terrible potencial militar contra la población de Siria con el apoyo de comparsas como el gobierno francés. En todo el mundo los partidarios del desorden capitalista repiten a coro: hay que castigar a Siria.
Frente a ellos, todos los pueblos del mundo rechazan la guerra, de entrada el pueblo norteamericano, harto ya de las agresiones militares de su gobierno, harto de que sus jóvenes sean utilizados para masacrar a los pueblos como en Iraq o Afganistán. Este rechazo ha provocado que el propio parlamento británico votase en contra, que más de cien congresistas de los Estados Unidos hayan exigido al Presidente que se discuta previamente en el Congreso.
En el Estado español, ya sabemos: otra vez Rota y Morón, por lo menos, forman parte del dispositivo norteamericano. Esta vez es peor: recientemente hemos visto cómo la sumisión servil de nuestros gobiernos permitía que la base norteamericana de Rota se ampliase y la de Morón acogiese cientos de marines para amenazar a Argelia y los pueblos del Magreb.
Repitámoslo, los pueblos, las masas trabajadoras de todo el mundo, golpeadas por el peso de la destrucción económica y el desmantelamiento de las conquistas sociales, de los derechos, ven con agobio cómo ahora se intenta agredir al pueblo sirio. Hemos visto ya esta barbarie caer sobre la población de Iraq, Afganistán, Palestina, Libia, sobre Haití, el Líbano y tantos otros países del mundo entero. El dinero y la ciencia que no se utilizan para crear empleo, para que toda la población mundial coma, se emplean en cambio masivamente para arrasar países enteros.
Precisamente estos últimos años de gravísimos ataques económicos a los trabajadores y pueblos en nombre de la “crisis” coinciden con la escalada de agresiones militares. ¿Por qué? Todos los gobiernos quieren utilizar la guerra para continuar los planes de ajuste y las contrarreformas sociales.
Necesitan amedrentar a los pueblos porque, en respuesta al desmantelamiento de sus medios de vida, se extienden los levantamientos: las revoluciones de Túnez y Egipto, el levantamiento del pueblo griego, portugués, nuestras propias movilizaciones, que enlazan con movilizaciones a distintos niveles en otros países europeos. Y más recientemente el levantamiento de los pueblos de Turquía, del Brasil, de Sudáfrica…
En esta situación, para mantener su dominación de hoy a mañana el capital necesita la estrecha colaboración de los dirigentes de los partidos y sindicatos de los trabajadores, y para ello en nombre de la “crisis” y ahora en nombre de la guerra les exige que participen en pactos con los partidos de la burguesía y las patronales. Pactos, en nuestro caso, para recortar las pensiones y los salarios, pactos con Rajoy o la CEOE, o con Mas y las otras autonomías.
Ahora, buscan el cierre de filas para atacar a Siria. En nuestro país, ante la debilidad del gobierno Rajoy, minoritario y odiado por las masas, Rubalcaba pretende que el partido socialista encabece el apoyo a Obama. ¡Qué vergüenza! Ningún socialista puede aceptar que el partido de Pablo Iglesias sea el partido de la guerra contra los pueblos.
Es inaceptable que fuerzas supuestamente de izquierda, obligadas a condenar el ataque de los Estados Unidos, se apresuren a añadir: “de igual manera” condenamos al régimen de Siria. La equidistancia. Si todo es igual, no vale la pena movilizarse contra el ataque imperialista. ¿O nos movilizamos contra todo y contra nada? Entonces Obama y sus partidarios pueden respirar. Esta posición complementa perfectamente la de los que en el seno del movimiento obrero apoyan la intervención criminal.
Resulta estruendoso el silencio sobre el ataque a Siria por parte de partidos que pretenden defender los derechos de las nacionalidades. Tampoco se han pronunciado hasta ahora los sindicatos. Es imprescindible que nuestras organizaciones, particularmente los sindicatos, que estuvieron a la cabeza de la lucha contra la participación española en la guerra contra Iraq, se pronuncien clara y contundentemente.
Las agresivas declaraciones de Obama y el coro hipócrita de los políticos y medios de comunicación de la burguesía, exige la más amplia y enérgica respuesta: que todas las fuerzas que se reclaman de los trabajadores y de los derechos de los pueblos se unan para decir:
- ¡No a la intervención militar de los Estados Unidos y sus comparsas contra Siria!
- ¡No a la utilización de bases e instalaciones situadas en el Estado español! ¡Fuera las bases!
- ¡Basta de injerencia en Siria de los Estados Unidos a través de Catar, Arabia Saudí o Turquía, con la colaboración de los gobiernos de la UE!
Apoyemos y reforcemos la campaña emprendida por la Plataforma contra la Guerra que rechaza “cualquier intento de socavar la independencia, la soberanía e integridad territorial de Siria, según el derecho a la autodeterminación de todos los pueblos.
Rechazamos contundentemente la intervención del estado español en esta guerra, bajo cualquier forma y el uso de las bases militares de Rota y de Morón para tal fin. No a la guerra. Abajo el imperialismo”. En particular, la Plataforma convoca: si hay bombardeos, ese día concentraciones a las 20 h. (en Madrid en Sol).
1 de septiembre de 2013