(publicado en la Carta Semanal 471)
“La confianza en la UE se desploma”, se titulaba un artículo publicado el pasado 9 de marzo, en el diario El País, que explicaba cómo “en 2007, dos de cada tres españoles decía confiar en la UE; en la última encuesta desconfía el 72%. Cifras parecidas se dan en toda la periferia. Pero también en el corazón de la UE, en Alemania y Francia”.
Este creciente rechazo alarma a todos los defensores de la Unión Europea, que, temen que se exprese en las próximas elecciones, bajo la forma de una abstención masiva o de voto a quienquiera que aparezca como enemigo de esa “Europa”. Por ello, desde los “europeístas” de izquierda se apresuran a presentar programas electorales que, bajo la forma de propuestas de reforma de la UE, fomenten la ilusión de que dentro de la Unión Europea es posible otra política, es posible gobernar en beneficio de los trabajadores y los pueblos. Reformas de las instituciones, de los tratados, de la deuda, etc., etc., etc.