Archivo por meses: enero 2023

Misiles o pensiones

Carta Semanal 924 en catalán

Carta Semanal 924 para descargar en PDF

Con este sugestivo título un periodista de La Vanguardia (Barcelona, 23 de enero) resumió la situación de Francia. Cuatro días antes, el jueves 19 de enero, la clase obrera francesa se había levantado con sus organizaciones contra la reforma de las pensiones, y el presidente Macron anunció un día después desde la base aérea de Mont de Marsan que la nueva Ley de Programación Militar (2024-2030) preveía un gasto de 413 000 millones de euros. O sea un aumento de un 35 por ciento en relación con el presupuesto actual. Cantidad cualitativamente superior al supuesto déficit del presupuesto de la Seguridad Social, supuesto porque el cálculo real de las cuentas de la Seguridad Social da que a este sistema está bastante equilibrado. Lo que está en juego no es una cuestión contable es una cuestión política de fondo. Al iniciarse la guerra de Ucrania los dirigentes del Medef (la patronal francesa) ya habían declarado que era necesario gastar en “defensa” como algo prioritario y por tanto que había que echar mano del tesoro de guerra de la clase obrera francesa, la caja de las pensiones.

Desde que fue elegido en 2017 Emmanuel Macron fijó como una de las prioridades la reforma de la Seguridad Social, continuando la política del presidente socialista Hollande que había impuesto una reforma del Código del Trabajo.

La reforma Macron implicaba liquidar el sistema de reparto e imponer un sistema de puntos, o sea de capitalización individual. Incluye desmantelar los 42 regímenes especiales (esta reforma fracasó cuando la movilización que tuvo su culmen el 5 de diciembre del 2019, con una huelga generalizada, fue abandonada en marzo de 2020, en plena pandemia). Regímenes que determinan las condiciones de jubilación de los diferentes sectores de trabajadores en función de las condiciones de trabajo, su punibilidad o riesgo. Estos regímenes especiales fueron un producto de la lucha de clases particular en el periodo revolucionario que se abrió en los años 1944-46 después de la derrota del nazismo y la entrada en acción de la clase obrera. El propio sistema público de la Seguridad Social, como otras medidas de este tipo fue el precio que la burguesía francesa tuvo que pagar para mantener el poder político y reconstruir el Estado burgués (con la colaboración en particular de las direcciones del PCF y la CGT). Desde entonces la burguesía francesa y los gobiernos, con la colaboración de las direcciones del PCF y del PS, han intentado “reformar” este sistema.

Para el capital financiero, en crisis, es una cuestión esencial apropiarse del dinero de la clase obrera, el salario diferido,.

En la elección de 2022 Macron volvió a la carga, pero no hay que olvidar que ganó las elecciones, no por su programa sino por la campaña en contra de la extrema derecha, después de que varias candidaturas de división como las del PCF impidieran que Jean Luc Mélenchon pasara a la segunda vuelta. Lo cual no impidió que en las elecciones legislativas de junio de 2022 los candidatos de la coalición organizada por Mélenchon fueran los más votados. El resultado es que por primera vez en la historia, la lista del presidente NO es mayoría en la Asamblea Nacional, y Macron se ve obligado a utilizar el articulo 49,ter para que se aprueben las leyes sin debate (artículo que muestra el carácter bonapartista del régimen de la V República).

Hoy la reforma se concreta (acaba de ser aprobada en el Consejo de Ministros y pasa al parlamento) en aumentar la edad de jubilación de 62 a 64 años, aumentar de 42 a 43 los años para tener la jubilación al 100 por cien  y empezar a desmantelar los regímenes especiales.

¿Cómo se expresa la resistencia?

Desde que, en mayo de 2022, Macron anunció la necesidad de la reforma, se formó un frente sindical unitario en contra. Nueve sindicatos, desde la CGT y FO hasta los sindicatos de cuadros, los cristianos y amarillos (CFTC y CFDT ) se pronunciaron en contra de la reforma. Y anunciaron movilizaciones si la reforma se presentaba a aprobación.

En enero de este año volvieron tambien a surgir los “chalecos amarillos”, sin duda no con el mismo impacto porque TODAS las organizaciones sindicales aparecían unidas dando en cierta medida confianza NO solo a la clase obrera sino a todos los sectores medios oprimidos y explotados por el gran capital por medio de la inflación desbocada (incluso el gremio de panaderos se manifestó el 23 de enero contra los precios de la energía).

Cuando Macron anunció que el Consejo de Ministros del miércoles 25 de diciembre iba a dar salida al proyecto de ley, la coalición sindical llamó a una jornada de huelga para el 19 de enero. El resultado de la huelga y las manifestaciones fueron más importantes que en 2019.

Estas organizaciones en la tarde del 19 se reunieron y comunicaron la necesidad de continuar la movilización, realizar asambleas y hacer una nueva jornada de huelga y manifestaciones el 31 de enero.

Las organizaciones sindicales de los jóvenes estudiantes llaman desde el 30 de enero a bloquear los centros de estudio y participar en las manifestaciones de los trabajadores y sus sindicatos.

Paralelamente La Francia Insumisa (sin el apoyo del PCF, del PS ni de los Verdes) llamó a una marcha a París el 21 de enero como complemento y en apoyo a la huelga convocada por los sindicatos. Este llamamiento se hizo a partir de la convocatoria de NUEVE organizaciones juveniles que tomaron la iniciativa. En efecto la participación de los jóvenes en esta manifestación fue notoria.

En cierta medida La Francia Insumisa aparece como el referente político de la mayoría social. En La Francia Insumisa participan codo con codo los militantes de la Cuarta Internacional organizados en el Partido Obrero Independiente.

Toda esa movilización y resistencia ha creado o acentuado la crisis política del régimen y sus partidos. La derecha está dividida e incluso en el partido de Macron (que se llama de centro) hay voces que se pronuncian contra la reforma de las pensiones. La extrema derecha de Marine Le Pen, muy ausente del escenario político, también se ve obligada a pronunciarse contra la reforma.

¿Cuál será el resultado? El resultado lo dará la movilización en curso, pero a nadie se le escapa la importancia internacional y europea de esta movilización y su efecto directo en países como España donde el gobierno está empeñado en el mismo tipo de reformas.

Consideramos necesario interpretar el contenido de fondo de lo que se juega en Francia. Por ello publicamos el artículo de Marc Gauquelin en Informations Ouvrières 741 del miércoles 24 de enero.

Se ha abierto un nuevo período

El hecho de que dos millones de trabajadores y ciudadanos respondieran el 19 de enero con huelgas y manifestaciones al llamamiento de las confederaciones sindicales unidas, revelando el verdadero equilibrio de fuerzas entre las clases, marca un punto de inflexión en la situación en este país.

Macron puede agitar, disfrutar del descanso del general en jefe en Mont de Marsan, encargar a su ministro de Trabajo, Olivier Dussopt, que declare al Journal du Dimanche: “Con esta reforma, no habrá perdedores” (22 de enero). Puede presentarse, junto con Olaf Scholz, como garante de la “soberanía europea”… Pero ya no tiene control sobre los procesos en curso en las profundidades de la sociedad.

En la noche del 19 de enero, todos los participantes (sindicalizados, no sindicalizados, trabajadores públicos y privados, jóvenes…) sintieron lo mismo, el inmenso poder de los trabajadores reunidos en unidad para exigir la retirada pura y simple de la reforma de las pensiones. Un sentimiento reforzado 48 horas después por la marcha del 21 de enero en París, iniciada por organizaciones juveniles y apoyada por LFI. Un sentimiento de confianza en su capacidad que ha conseguido lograr y preservar la unidad de sus organizaciones poniendo a su alcance manos el abandono de su proyecto por parte del gobierno.   

Este gobierno, socavado por la pérdida de su mayoría en la Asamblea Nacional, aislado de la mayoría de la población, está multiplicando los signos de debilidad. Nunca se ha mostrado tan inseguro sobre el futuro.

Para estos millones de trabajadores y ciudadanos que se pusieron en marcha el 19 y 21 de enero y que ya están comprometidos en la preparación de la jornada de huelga y manifestaciones del 31 de enero, la cuestión de cuáles son las formas de acción capaces de ampliar y profundizar aún más el movimiento está en el centro de todas las preocupaciones.

Como lo está la cuestión de las formas de organización necesarias para garantizar el marco de la unidad de las organizaciones de clase indispensables para la unión de las masas.  En esta lucha, hasta el final, para hacer que Macron retroceda en las pensiones es donde se forjan las herramientas y se forjan las relaciones políticas que llevarán a dar un paso más e integrar en su lucha la dimensión de la lucha para acabar con este gobierno. En este sentido, el día 19 de enero, con sus dos millones de huelguistas y manifestantes, cierra un período para abrir otro, devolviendo a la clase obrera su lugar como elemento central de toda la situación.

Un período que inevitablemente avanzará hacia la confrontación con el poder bonapartista de Macron, para abrir paso a un resultado acorde con los  intereses  de la población trabajadora y el respeto  de  los  principios de la democracia.

Míssils o pensions

Carta Setmanal 924 per descarregar en PDF

Amb aquest suggestiu títol un periodista de La Vanguardia (Barcelona, 23 de gener) va resumir la situació de França. Quatre dies abans, el dijous 19 de gener, la classe obrera francesa s’havia aixecat amb les seves organitzacions contra la reforma de les pensions, i el president Macron va anunciar un dia després des de la base aèria de Mont de Marsan que la nova Llei de Programació Militar (2024-2030) preveia una despesa de 413.000 milions d’euros. O sigui un augment d’un 35 per cent en relació amb el pressupost actual. Quantitat qualitativament superior al suposat dèficit del pressupost de la Seguretat Social, supòsit perquè el càlcul real dels comptes de la Seguretat Social dóna que a aquest sistema està força equilibrat. El que està en joc no és una qüestió comptable és una qüestió política de fons. En iniciar-se la guerra d’Ucraïna els dirigents del Medef (la patronal francesa) ja havien declarat que calia gastar en “defensa” com una cosa prioritària i per tant que calia ficar mà del tresor de guerra de la classe obrera francesa, la caixa de les pensions.

Des que va ser elegit el 2017 Emmanuel Macron va fixar com una de les prioritats la reforma de la Seguretat Social, continuant la política del president socialista Hollande que havia imposat una reforma del Codi del Treball.

La reforma Macron implicava liquidar el sistema de repartiment i imposar un sistema de punts, o sigui de capitalització individual. Inclou desmantellar els 42 règims especials (aquesta reforma va fracassar quan la mobilització que va tenir el seu moment més àlgid el 5 de desembre del 2019, amb una vaga generalitzada, va ser abandonada el març del 2020, en plena pandèmia). Règims que determinen les condicions de jubilació dels diferents sectors de treballadors en funció de les condicions de treball, la seva punibilitat o risc. Aquests règims especials van ser un producte de la lluita de classes particular en el període revolucionari que es va obrir els anys 1944-46 després de la derrota del nazisme i l’entrada en acció de la classe obrera. El mateix sistema públic de la Seguretat Social, com altres mesures d’aquest tipus va ser el preu que la burgesia francesa va haver de pagar per mantenir el poder polític i reconstruir l’Estat burgès (amb la col·laboració en particular de les direccions del PCF i la CGT). Des d’aleshores la burgesia francesa i els governs, amb la col·laboració de les direccions del PCF i del PS, han intentat “reformar” aquest sistema.

Per al capital financer, en crisi, és una qüestió essencial apropiar-se delsdiners de la classe obrera, el salari diferit,.

En l’elecció del 2022 Macron va tornar a la càrrega, però no cal oblidar que va guanyar les eleccions, no pel seu programa sinó per la campanya en contra de l’extrema dreta, després que diverses candidatures de divisió com les del PCF impedissin que Jean Luc Mélenchon passés a la segona volta. La qual cosa no va impedir que en les eleccions legislatives de juny de 2022 els candidats de la coalició organitzada per Mélenchon fossin els més votats. El resultat és que per primera vegada en la història, la llista del president NO és majoria a l’Assemblea Nacional, i Macron es veu obligat a utilitzar l’article 49,5 perquè s’aprovin les lleis sense debat (article que mostra el caràcter bonapartista del règim de la V República).

Avui la reforma es concreta (acaba de ser aprovada al Consell de Ministres i passa al parlament) a augmentar l’edat de jubilació de 62 a 64 anys, augmentar de 42 a 43 els anys per tenir la jubilació al 100 per cent i començar a desmantellar els règims especials.

Com s’expressa la resistència?

Des que, el maig del 2022, Macron va anunciar la necessitat de la reforma, es va formar un front sindical unitari en contra. Nou sindicats, des de la CGT i FO fins als sindicats de quadres, els cristians i grocs (CFTC i CFDT ) es van pronunciar en contra de la reforma. I van anunciar mobilitzacions si la reforma es presentava a aprovació.

El gener d’aquest any van tornar també a sorgir les “armilles grogues”, sens dubte no amb el mateix impacte perquè TOTES les organitzacions sindicals apareixien unides donant en certa mesura confiança NO només a la classe obrera sinó a tots els sectors mitjans oprimits i explotats pel gran capital per mitjà de la inflació desbocada (fins i tot el gremi de forners es va manifestar el 23 de gener contra els preus de l’energia).

Quan Macron va anunciar que el Consell de Ministres del dimecres 25 de desembre anava a donar sortida al projecte de llei, la coalició sindical va cridar a una jornada de vaga per al 19 de gener. El resultat de la vaga i les manifestacions van ser més importants que el 2019.

Aquestes organitzacions a la tarda del 19 es van reunir i comunicar la necessitat de continuar la mobilització, fer assemblees i fer una nova jornada de vaga i manifestacions el 31 de gener.

Les organitzacions sindicals dels joves estudiants criden des del 30 de gener a bloquejar els centres d’estudi i participar en les manifestacions dels treballadors i els seus sindicats.

Paral·lelament La França Insumisa (sense el suport del PCF, del PS ni dels Verds) va cridar a una marxa a París el 21 de gener com a complement i en suport a la vaga convocada pels sindicats. Aquesta crida es va fer a partir de la convocatòria de NOU organitzacions juvenils que van prendre la iniciativa. En efecte la participació dels joves en aquesta manifestació va ser notòria.

En certa mesura La França Insumisa apareix com el referent polític de la majoria social. A La França Insumisa participen colze amb colze els militants de la Quarta Internacional organitzats al Partit Obrer Independent.

Tota aquesta mobilització i resistència ha creat o accentuat la crisi política del règim i els seus partits. La dreta està dividida i fins i tot en el partit de Macron (que es diu de centre) hi ha veus que es pronuncien contra la reforma de les pensions. L’extrema dreta de Marine Le Pen, molt absent de l’escenari polític, també es veu obligada a pronunciar-se contra la reforma.

Quin serà el resultat? El resultat el donarà la mobilització en curs, però a ningú se li escapa la importància internacional i europea d’aquesta mobilització i el seu efecte directe en països com Espanya on el govern està immers en el mateix tipus de reformes.

Considerem necessari interpretar el contingut de fons del que es juga a França. Per això publiquem l’article de Marc Gauquelin a Informations Ouvrières 741 del dimecres 24 de gener.

S’ha obert un nou període

El fet que dos milions de treballadors i ciutadans responguessin el 19 de gener amb vagues i manifestacions a la crida de les confederacions sindicals unides, revelant el veritable equilibri de forces entre les classes, marca un punt d’inflexió en la situació en aquest país.

Macron pot agitar, gaudir del descanso del general en cap a Mont de Marsan, encarregar al seu ministre de Treball, Olivier Dussopt, que declari el Journal du Dimanche: “Amb aquesta reforma, no hi haurà perdedors” (22 de gener). Es pot presentar, juntament amb Olaf Scholz, com a garant de la “sobirania europea”… Però ja no té control sobre els processos en curs en les profunditats de la societat.

La nit del 19 de gener, tots els participants (sindicalitzats, no sindicalitzats, treballadors públics i privats, joves…) van sentir el mateix, l’immens poder dels treballadors reunits en unitat per exigir la retirada pura i simple de la reforma de les pensions. Un sentiment reforçat 48 hores després per la marxa del 21 de gener a París, iniciada per organitzacions juvenils i recolzada per LFI. Un sentiment de confiança en la seva capacitat que ha aconseguit assolir i preservar la unitat de les seves organitzacions posant al seu abast mans l’abandonament del seu projecte per part del govern.   

Aquest govern, soscavat per la pèrdua de la seva majoria a l’Assemblea Nacional, aïllat de la majoria de la població, està multiplicant els signes de debilitat. Mai s’ha mostrat tan insegur sobre el futur.

Per a aquests milions de treballadors i ciutadans que es van posar en marxa el 19 i 21 de gener i que ja estan compromesos en la preparació de la jornada de vaga i manifestacions del 31 de gener, la qüestió de quines són les formes d’acció capaces d’ampliar i aprofundir encara més el moviment és al centre de totes les preocupacions.

Com ho està la qüestió de les formes d’ organització necessàries per garantir el marc de la unitat de les organitzacions de classe indispensables per a la unió de les masses.  En aquesta lluita, fins al final, per fer que Macron retrocedeixi en les pensions és on es forgen les eines i es forgen les relacions polítiques que portaran a fer un pas més i integrar en la seva lluita la dimensió de la lluita per acabar amb aquest govern. En aquest sentit, el dia 19 de gener, amb els seus dos milions de vaguistes i manifestants, tanca un període per obrir-ne un altre, retornant a la classe obrera el seu lloc com a element central de tota la situació.

Un període que inevitablement avançarà cap a la confrontació amb el poder bonapartista de Macron, per obrir pas a un resultat d’acord amb els interessos de la població treballadora i el respecte dels principis de la democràcia.

El CATP en la lluita contra la guerra

Carta Setmanal 923 per descarregar en PDF

Aviat es complirà un any des del començament de la invasió russa d’Ucraïna (la guerra a la regió es va iniciar, al Donbàs, el 2014). Un any en què la guerra ha portat la mort de milers de joves russos i ucraïnesos, la destrucció d’Ucraïna, la misèria creixent per a la població treballadora de tota Europa, aixafada per la pujada dels preus de productes de primera necessitat, la destrucció de bona part de la indústria europea. I els dirigents dels EUA i l’OTAN defensen la continuació de la guerra “fins a la victòria total” d’Ucraïna (que suposarà la destrucció total de bona part del seu territori).

En tot aquest temps, els militants i organitzacions que participen en el CATP han lluitat per guanyar més companys i agrupar-los per al combat contra la guerra.

29 de enero, conferencia del CATP

El 29 de gener de 2022, quan ja sonaven tambors de guerra, la conferencia del CATP, celebrada a Madrid, aprovava una declaració amb el títol “No a la Guerra de l’OTAN”

En ella s’assenyalava que  “l’ampliació d’estats membres de l’OTAN no te res a veure ni amb la pau, ni la seguretat d’aquests estats, si no que obeeix única i exclusivament als interessos de l’administració americana que vol refermar la seva hegemonia mundial en l’actual guerra comercial  amb la Xina. El perill d’un conflicte bèl·lic és contrari als interessos dels pobles europeus, que el que necessiten és pau i cooperació entre ells mateixos, per poder conquerir o salvaguardar els seus drets socials i democràtics”.

I afegia que “la decisió de multiplicar les despeses militars en aquest any 2022, per part del govern, és contraria a la necessitat de satisfer les necessitats socials, en particular, la sanitat i l’educació, i a reintegrar a la Seguretat Social les decenes de milers de milions utilitzats per pagaments aliens a les pensions”.

9 d’ abril, conferència d’ urgència

El 9 d’abril, poc més d’un mes després d’iniciar-se la invasió de les tropes de Putin, el CATP va agrupar companys per participar en una conferència europea d’urgència, convocada a iniciativa del Nou Corrent d’Esquerra (NAR), de Grècia, i el Partit Obrer Independent (POI), de França, que es dirigien “a tots els militants, grups i organitzacions que rebutgen veure’s arrossegats a la guerra desencadenada per Rússia, els Estats Units i l’OTAN, guerra que els pobles no volen, i que rebutgen la unió sagrada que reclamen els governs implicats en la liquidació de totes les conquestes socials”. La crida del POI i el NAR partia del fet que els trust i els oligarques s’enfronten brutalment pel repartiment d’un mercat mundial sobresaturat. I de com aquesta competència econòmica pel mercat mundial es tradueix en l’acció dels governs al servei del capital financer: “El Govern nord-americà i el seu braç armat, l’OTAN, uneixen el carro a tots els Governs de la UE (…) Sota aquesta pressió, els estats majors dels monopolis imperialistes estan compromesos en un gir, coordinat per les institucions europees, que amenaça de destruir l’aparell productiu dels països europeus i totes les relacions socials basades en el reconeixement de les conquestes polítiques i socials de la classe obrera. Aquest gir condemna a l’atur, a la misèria ia la guerra milions de treballadors i les seves famílies”. La crida assenyala la nova etapa oberta per la guerra: “La guerra a Ucraïna marca l’entrada en un nou període en què les rivalitats entre capitalistes desembocaran cada cop més en el recurs a les armes. La intensificació d’aquestes rivalitats amenaça la mateixa supervivència de la humanitat”. I també l’oposició dels pobles a la guerra i la seva utilització pels governs per imposar els plans del capital financer: “Els pobles no volen la guerra. Ni el poble rus, ni el poble ucraïnès volen la guerra”.

“Els governs al servei del capital exigeixen la unió sagrada en nom de la guerra. La patronal espanyola ha declarat: “La realitat és que estem en guerra (…). És un moment molt important per fer una contenció salarial”; o bé la primera ministra sueca que explicava, a la Cimera Europea de Versalles: “M’agradaria molt invertir els diners dels contribuents en escoles i pensions, però hem de gastar-los en defensa”. Assenyalant així la relació entre guerra i guerra social, entre lluita contra la guerra i lluita en defensa de les conquestes socials i per les reivindicacions. La conferència es va pronunciar contra les crides a la unió sagrada declarant que “Truquen a la unió sagrada per intentar emmordassar els assalariats i les seves organitzacions en el moment mateix en què s’anuncien les mesures més brutals contra les pensions, contra els drets socials, contra els serveis públics, contra tots els acords col·lectius sobre el contracte laboral (…) Amb la unió sagrada, els Governs exigeixen als treballadors que renunciïn a les reivindicacions ia les llibertats (…) Nosaltres diem: Aquesta no és la nostra guerra, s’està lliurant pels interessos dels trust i de les multinacionals. Els pobles no poden esperar res, no poden guanyar res amb la competència imperialista, amb els governs promotors de guerra, siguin on siguin.

I la necessitat d’ajudar a organitzar el rebuig a la guerra de la població treballadora: “Hem de contribuir, a cada país del vell continent, a ajudar els treballadors a rebutjar la unió sagrada, a agrupar-se al terreny de classe per derrotar els plans de suposada «reorganització» de la producció i de les relacions socials. Aquest és lúnic mitjà per aturar el mecanisme de la guerra”.

Madrid, 25 de juny 2022, Trobada Europea contra la Guerra: “ni Putin ni OTAN”

  En una trobada que va reunir militants de diversos països europeus, coincidint amb la cimera de l’OTAN, aprovàvem una declaració que deia, entre altres coses: “Nosaltres, que hem exigit des del primer dia un alto el foc i la retirada de l’exèrcit de Putin d’Ucraïna, volem denunciar el torrent de mentides amb què ens inunden cada dia. Aquesta guerra no és ni una guerra per defensar Rússia, com pretén Putin, ni una guerra “en defensa dels valors d’Europa”, com pretenen Biden, Scholtz, Johnson, Macron i Draghi. La guerra que devasta Ucraïna enfronta, pel control de la distribució de matèries primeres, els oligarques russos representats per Putin amb els caps dels monopolis imperialistes, representats pels caps d’Estats membres de l’OTAN”. L’endemà de la trobada, la majoria de participants s’unia a un seguici internacional a la manifestació convocada contra la cimera de l’OTAN, manifestació entre els convocants de la qual es trobava el CATP i que va reunir desenes de milers de persones. En coherència amb la declaració aprovada: “L’OTAN és la guerra, és la intervenció directa de l’imperialisme nord-americà a Europa, trepitjant tota sobirania dels pobles, imposant el vertiginós augment dels pressupostos de guerra. La Unió Europea i els governs europeus voten més i més milers de milions per a la guerra i els detreuen de l’ensenyament, la sanitat, les pensions, “La declaració assenyalava, encertadament, les greus conseqüències de la guerra per a la classe treballadora: “La guerra combinada amb l’especulació comporta penúria i pujades de preus que sumen milions de persones a la misèria, a Europa ia tots els continents ”.

Però no es quedava al terreny de la denúncia. Incloïa una crida a l’acció de militants i organitzacions obreres: “Els nostres governs, alhora que ataquen totes les conquestes socials, pretenen que les organitzacions sindicals renunciïn a les reivindicacions més immediates, a les reivindicacions fonamentals: pensions, protecció social, serveis públics ( …) És responsabilitat de tot militant obrer, de tot demòcrata, tirar endavant la lluita contra la guerra, unificar el moviment antiguerra amb la lluita pel pa, la pau, la salut i la llibertat, per la congelació de preus i el augment de salaris, contra els governs i el capitalisme bàrbar”.

Gener de 2023: Manifest Alto a la Guerra! Alto el foc immediat, sense condicions!

En aquests moments, recollim suport per a un manifest per un alto el foc immediat, signat per centenars de militants de tot Europa, que va ser presentat en roda de premsa davant les Corts l’11 de gener, i en preparem actes de presentació.

El manifest parteix de les conseqüències de la guerra, que “té ja les seves conseqüències polítiques i econòmiques a tot el món. Suposa l´amenaça d´un perill mortal per a tots els pobles d´Europa i de tots els continents”.

Per tant, “Per preservar la humanitat, cal aturar aquesta marxa cap a la barbàrie. La guerra de Putin, com la de l’OTAN a càrrec de Zelenski, no és la nostra guerra (…) Volem la pau per al poble rus i per al poble ucraïnès”. Aturar la guerra, oposar-se a la seva escalada, no és recolzar Putin: “En envair Ucraïna, Putin es va llançar a una aventura criminal i sense sortida per al poble rus i el poble ucraïnès. Putin no defensa el poble rus. Exigim la retirada de les tropes de l’exèrcit de Putin. Condemnem l’escalada bèl·lica de l’OTAN i exigim la retirada de les tropes de tots els països de l’OTAN”.

I s’oposa a tota la política de guerra i de guerra social. Els signants del manifest ens oposem: “Al fet que els dirigents dels nostres Estats subministrin armes que maten i fereixen centenars de milers d’éssers humans dels dos bàndols amb la seva multitud de massacres, refugiats, destrucció (…) A «sancions econòmiques» contra el poble rus, exigides pel Govern nord-americà, que s’utilitzen per disparar els preus, els beneficis rècord dels trust i oligarques del petroli, la compra massiva de gas d’esquist, un inici de col·lapse industrial a Europa (…) A que s’utilitzin milers i milers de milions per al rearmament d’Ucraïna en benefici de la indústria d’armament i en detriment dels pobles treballadors amb retallades a tots els pressupostos públics, hospitals, escoles, etc”.

.Per tot això, “Llancem una crida a tots els treballadors i militants d’Europa a unir les seves forces per aturar aquest engranatge mortal i aquesta carnisseria i pel cessament de la guerra i un alto el foc immediat!”. El combat contra la guerra ha de continuar. Els participants a la roda de premsa de presentació del manifest han proposat una reunió àmplia de tots els signants del mateix per debatre com impulsar la campanya i formar un equip de coordinació. Convidem tots els lectors d’aquesta carta a subscriure el manifest i participar a aquesta reunió, que es farà per videoconferència el proper dia 25.

 

El CATP en la lucha contra la guerra

Carta Semanal 923 en catalán

Carta Semanal 923 para descargar en PDF

Pronto se cumplirá un año desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania (la guerra en la región se inició, en el Donbás, en 2014). Un año en que la guerra ha traído la muerte de miles de jóvenes rusos y ucranianos, la destrucción de Ucrania, la miseria creciente para la población trabajadora de toda Europa, aplastada por la subida de los precios de productos de primera necesidad, la destrucción de buena parte de la industria europea. Y los dirigentes de los EE.UU. y la OTAN defienden la continuación de la guerra “hasta la victoria total” de Ucrania (que supondrá la destrucción total de buena parte de su territorio).

En todo este tiempo, los militantes y organizaciones que participan en el CATP han luchado por ganar más compañeros y agruparlos para el combate contra la guerra. Sigue leyendo

Davant l’intent de cop d’Estat al Brasil

Carta Setmanal 922 per descarregar en PDF

En les eleccions presidencials del Brasil, celebrades l’octubre del 2022, Lula, candidat del partit dels Treballadors (PT) va vèncer amb un 50,9% dels vots davant el 49,1% de Bolsonaro (dos milions de diferència).  Però l’ultradretà, que havia fet campanya denunciant que hi havia d’haver un frau a les eleccions, mai ha acceptat plenament els resultats.

Recordem que qui sí que va arribar a la presidència per mitjà d’actuacions fraudulentes va ser el mateix Bolsonaro, fa quatre anys, quan l’aparell judicial va impedir que es presentés Lula com a candidat (les enquestes li donaven com a guanyador), per suposats delictes de corrupció (Lula va ser fins i tot condemnat, sense cap prova real, però la condemna va ser posteriorment anul·lada).

Seguint Bolsonaro, molts dels seus partidaris no han reconegut el resultat de les eleccions presidencials. Han protagonitzat talls de carreteres, aturades patronals, i altres mesures. I han multiplicat les crides que l’exèrcit intervingués per impedir la presa de possessió de Lula.

Malgrat tot, Lula va prendre possessió com a president el passat 1 de gener, acompanyat per centenars de milers de manifestants.

Milers de partidaris de Bolsonaro acampen des que es van fer oficials els resultats electorals, davant la Caserna General de l’Exèrcit, a la capital federal, Brasília. També acampen davant casernes en altres indrets del país.  Els financen alguns empresaris, que han pagat també els autobusos per al seu desplaçament.

L’assalt a seus governamentals

El diumenge 8 de gener, a Brasília, els bolsonaristes surten del seu lloc d’acampada, per dirigir-se tranquil·lament a peu a la plaça dels Tres Poders, on es troben les seus de la presidència, el congrés i el tribunal suprem federal. Se’ls uneixen els que han arribat uns 150 autobusos per sumar-se a la mobilització La Policia Mil·litar  de l’Estat[1] els escorta com si res, cosa que no és d’estranyar, ja que el secretari estatal en funcions de Seguretat Pública del Districte Federal li diu al governador en un missatge d’àudio -desvetllat per Folha de S.Paulo- que els manifestants,  amb els que han negociat, avancen pacíficament.

A la plaça dels Tres Poders, avancen en massa i superen fàcilment la barrera d’uns pocs agents que protegeixen el Congrés, envaint l’edifici.  També assalten el palau presidencial de Planalto, i la seu del Tribunal Suprem, on arriben fins al saló de plens.  I tot això malgrat que el servei secret ABIN (per les seves sigles en portuguès) havia alertat diversos organismes de seguretat sobre el risc que en les pròximes hores assaltin edificis públics

Sis hores després, Lula ordena a les forces de seguretat que intervinguin. Fan un enorme desplegament i a poc a poc van reprenent el control.

La passivitat del govern

Mentre tot això succeeix, el govern de Lula triga a reaccionar. Recordem que és un govern d'”unitat nacional”, que inclou fins i tot ministres que van votar per la destitució de Dilma Roussef i a antics bolsonaristes. El ministre d’Agricultura és Carlos Fávaro, un gran terratinent que va ser president de l’associació de productors de soja i blat de moro de l’estat de Mato Grosso, un dels graners del país. El de defensa, José Múcio Monteiro, segons explica El País “es mou bé en ambients militars”, i va ser elogiat fins i tot pel vicepresident de Bolsonaro, el general Hamilton Mourão.

La premsa explica que la tardança a respondre del govern es deu a discrepàncies internes. El ministre de Justícia, Flavio Dino, defensava recórrer a la força si els manifestants no es dispersaven, mentre el de Defensa, José Múcio, advocava per evitar la confrontació a tota costa ¡mentre els assaltants controlaven les seus de la presidència, el congrés i el poder judicial!

I ara?

El succeït posa de manifest la complicitat de sectors de l’aparell d’Estat amb els assaltants, i la debilitat del govern en la seva resposta.

Segons El País, el president Luiz Inácio Lula da Silvasospita dels militars, sospita de la policia militaritzada del Districte Federal i del seu governador; sospita dels serveis d’intel·ligència, de l’expresident Jair Bolsonaro, però també d’integrants del seu propi Govern”.  Immediatament després dels successos, va llançar afirmacions molt dures.  “L’exèrcit sabia el que es tramava i va mostrar complaença amb els manifestants”. “Cap general s’ha mogut per dir que això no pot ocórrer”. “Cap caserna va fer res. Això estava previst. La gent estava davant les casernes”.  Però després, tant ell com el seu govern semblen estar fent marxa enrere. El ministre de Relacions Institucionals, Alexandre Padilha, segons la premsa “va matisar les frases del president i va explicar que hi ha sospites de ‘contaminació bolsonarista’ en alguns militars, però que el Govern manté la confiança en la institució.

S’ha detingut Augusto Vieira, comandant de la Policia Militar (PM) de Brasília (que, com hem assenyalat, es va limitar a acompanyar els manifestants i va oposar poca resistència el seu assalt). També, s’ha ordenat l’ingrés a presó també a Anderson Torres, ex-ministre de Justícia de Bolsonaro i que estava a càrrec de la seguretat a Brasília el 8 de gener.  Perquè és clar que el govern del Districte Federal de Brasília va col·laborar amb els bolsonaristes que van organitzar l’assalt.

El president Lulava ordenar, després de l’assalt, la intervenció federal per assumir el control de la seguretat pública a Brasília i la resta del Districte Federal fins al 31 de gener.  Però el govern no es limita a perseguir els colpistes. De fet, també estan prohibides les manifestacions de les organitzacions obreres (hi havia una crida a una concentració a Brasília dimecres passat, i s’ha reconvertit en un acte simbòlic per al diumenge 15)

S’ha obert una investigació sobre el finançament de les bolsonaristes acampades, sobre qui va pagar els autobusos per al seu desplaçament, i sobre qui va ordenar i organitzar l’assalt. Es parla d’una possible reorganització dels serveis secrets, als quals veu massa propers al poder militar. L’Agència Brasilera d’Intel·ligència (Abin) depèn del Gabinet de Seguretat Institucional (GSI), l’ex Casa Militar. El vicepresident Geraldo Alckmin, havia proposat acabar amb una estructura organitzativa que es considera una “rèmora de la dictadura militar” que va governar Brasil, entre 1964 i 1985.  El ministre de Justícia, Flavio Dino, va dir a O Globo que s’ha de “seguir el model internacional i tenir una intel·ligència estatal civil”, ja que “la formació de molts militars brasilers encara es remunta a la Guerra Freda i a la visió de la suposada amenaça comunista. Això contamina el servei d’Intel·ligència”.

Però no és només l’exèrcit. Totes les institucions de l’Estat, heretades de la dictadura militar i que no van patir cap depuració, són un obstacle per a qualsevol política en favor de la majoria treballadora del Brasil. No oblidem la presència de desenes de militars al govern de Bolsonaro, i les actuacions del poder judicial per forçar la destitució de la presidenta Dilma Roussef i per enviar a presó Lula -per falses i infundades acusacions de corrupció- i impedir  que es presentés a les eleccions presidencials. D’aquí l’exigència, que aixequen milers de militants del Brasil, d’una Assemblea Constituent per acabar amb totes les rèmores de la dictadura.

Ara es multipliquen les pressions, des de fora i des de dins del govern, perquè el govern moderi la seva actitud, en bé de la suposada “reconciliació nacional”.

El que opinen els nostres corresponsals al Brasil

Diàleg i Acció Petista, agrupament del PT en el qual participen els militants de la IV Internacional al Brasil va difondre una declaració, immediatament després dels fets. Reproduïm el seu text:

DAVANT L’ATAC FEIXISTA A BRASÍLIA

Diàleg i Acció Petista es dirigeix a tots els membres del PT per compartir la indignació contra la fàcil invasió de milers de vàndals de les seus del poder, ahir, 8 de gener, a Brasília, un atac l’objectiu polític del qual era el nou govern. Juntament amb la direcció del partit, cridem a la defensa del govern. Juntament amb Lula, acusem Bolsonaro de ser responsable d’aquesta acció feixista.

Aquesta operació colpista encara no està clara en tots els seus aspectes, però, pel moment, ha fracassat. Per tant, ha arribat el moment que el govern passi a l’ofensiva per fer valer el seu mandat, que gaudeix del suport popular.

Els actes de vandalisme OSCURANTISTA perpetrats contra el patrimoni nacional han de ser castigats.

L’ Estat ha de ser DESBOLSONARITZAT.  Això significa netejar la cadena de comandament policial i militar que, per complicitat o omissió, ha permès aquests actes. Després de la intervenció decretada pel president Lula a la Seguretat Pública del Districte Federal (DF) i la suspensió per part del Tribunal Federal Suprem (STF) del governador Ibaneis, el manteniment al seu lloc del ministre de Defensa, José Múcio, encarregat de custodiar el Palau de Planalto, és motiu de sorpresa.

També cal arribar als que han finançat aquesta gran operació nacional i colpista, que han de ser castigats, fins i tot amb la CONFISCACIÓ (indisponibilitat dels seus béns d’acord amb els termes de la llei). Les multes simples no els impediran continuar actuant per desafiar el govern novament, com ja estan anunciant. No hi ha unió ni pacificació possible. És hora de tallar el mal d’arrel.

NO A L’AMNISTIA, COLPISTES A LA PRESÓ!

També cal dur a terme el calendari de MOBILITZACIONS populars que avui comença en diferents ciutats per tal d’aïllar els feixistes i expulsar-los dels carrers. El govern, volem creure, sabrà com tirar endavant l’agenda de MESURES populars i compromisos de campanya on pugui posar el seu principal suport. No confiem en el discurs actual dels aliats de Bolsonaro que encara són a les eleccions. Hem assistit, tota la setmana passada, a totes les pressions del “mercat” per sotmetre el govern a l’austeritat fiscal. Mentre que les mesures socials urgents i conegudes són a l’agenda!

Finalment, truquem a tots a l’acció unida, i convidem aquells que estiguin interessats a discutir amb nosaltres en les reunions del Grup Central de DAP les emergències de la situació.

Gener 9, 2023

ACTUAR COM EL PT ACTUAVA!

Diàleg i Acció Petista

 

[1] Recordem que Brasil és un Estat Federal, i que les competències de policia corresponen als Estats.

Ante el intento de golpe de Estado en Brasil

Carta Semanal 922 en catalán

Carta Semanal 922 para descargar en PDF

En las elecciones presidenciales de Brasil, celebradas en octubre de 2022, Lula, candidato del partido de los Trabajadores (PT) venció con un 50,9% de los votos frente al 49,1% de Bolsonaro (dos millones de diferencia).  Pero el ultraderechista, que había hecho campaña denunciando que iba a haber un fraude en las elecciones, nunca ha aceptado plenamente los resultados.

Recordemos que quien sí llegó a la presidencia por medio de actuaciones fraudulentas fue el propio Bolsonaro, hace cuatro años, cuando el aparato judicial impidió que se presentara Lula como candidato (las encuestas le daban como ganador), por supuestos delitos de corrupción (Lula fue incluso condenado, sin ninguna prueba real, pero la condena fue posteriormente anulada).

Siguiendo a Bolsonaro, muchos de sus partidarios no han reconocido el resultado de las elecciones presidenciales. Han protagonizado cortes de carreteras, paros patronales, y otras medidas. Y han multiplicado los llamamientos a que el ejército interviniera para impedir la toma de posesión de Lula.

A pesar de todo, Lula tomó posesión como presidente el pasado 1 de enero, acompañado por cientos de miles de manifestantes. Sigue leyendo

¡Solidaridad con el pueblo trabajador de Perú y sus organizaciones!

Carta Semanal 921 en catalán

Carta Semanal 921 para descargar en PDF

A comienzos del mes de diciembre, un enfrentamiento entre el presidente de Perú, Pedro Castillo, y el congreso dominado por una mayoría parlamentaria de derecha daba lugar a la apertura de una grave crisis política.

Ante la amenaza de “golpe blanco” del Congreso contra Castillo, con la tercera votación de su “vacante” (juicio político), el  todavía presidente declaró la disolución del Congreso, la declaración de un estado de excepción y elecciones anticipadas con carácter constituyente. Al hacerlo Castillo intentó utilizar una disposición constitucional ya utilizada por algunos de sus predecesores (como Martín Vizcarra en 2019). Pero el aparato judicial y militar se negó a seguir a Castillo, quien fue arrestado por su propia escolta. Sigue leyendo

Solidaritat amb el poble treballador de Perú i les seves organitzacions!

Carta Setmanal 921 per descarregar en PDF

A començaments del mes de desembre, un enfrontament entre el president de Perú, Pedro Castillo, i el congrés dominat per una majoria parlamentària de dreta donava lloc a l’obertura d’una greu crisi política.

Davant l’amenaça de “cop blanc” del Congrés contra Castillo, amb la tercera votació de la seva”vacant” (judici polític), l’encara president va declarar la dissolució del Congrés, la declaració d’un estat d’excepció i eleccions anticipades amb caràcter constituent. En fer-ho Castillo va intentar utilitzar una disposició constitucional ja utilitzada per alguns dels seus predecessors (com Martín Vizcarra el 2019). Però l’aparell judicial i militar es va negar a seguir Castillo, qui va ser arrestat per la seva pròpia escorta. 

El congrés va declarar presidenta de Perú a Dina Boluarte, vicepresidenta de la candidatura de Castillo, però que havia trencat amb el seu govern.  El govern dels Estats Units es va apressar a reconèixer-la, com la nova presidenta de Perú. El van seguir la majoria de països llatinoamericans. I el govern de coalició “progressista”. Però el poble peruà no va acceptar ni la presidència de Dina ni que es mantingués el mandat d’un congrés la popularitat del qual era, fins i tot, molt menor que la de Castillo (les enquestes li donaven un 4% d’aprovació popular).

Immediatament van començar les manifestacions i bloquejos de carreteres, sobretot a sud del país, com a Ayacucho i Puno.

La demanda d’eleccions a una Assemblea Constituent

El 8 de desembre, una declaració de “El Trabajo”, una tribuna lliure de la lluita de classes animada pels militants de la secció peruana de la 4a Internacional, afirmava:

“Cap cop o contracop és una solució als grans problemes del país, ni a les reivindicacions urgents dels treballadors, pagesos i la nació.  Avui, és urgent que el poble tingui la capacitat de decidir davant un congrés impopular amb menys d’un 5% de suport popular, convocant eleccions per a una Assemblea Constituent sobirana ara! “

 Per la seva banda, la CGTP, principal organització sindical del país, declarava el 7 de desembre “que la constant inestabilitat  política, social i econòmica del Perú té les seves arrels en l’espúria Constitució de 1993, que és urgent crear un nou contracte social en el qual prevalguin els interessos del poble i no dels grups de poder econòmic que detenen el  control del nostre país”.  Per després agregar que “hem d’estar mobilitzats i vigilants del respecte irrestricte de la democràcia   i els drets laborals, per una reforma política, una nova constitució i l’anticipació de les eleccions generals”.

Una brutal repressió

El govern de Dina Boluarte va respondre a les mobilitzacions populars –que qualifica d’actes vandàlics- amb una brutal repressió a mans de l’exèrcit i de la policia. El govern reconeix 21 morts, tot i que les organitzacions populars parlen de més de 30. La CGTP va declarar en un comunicat que “condemna enèrgicament el cruel assassinat dels nostres germans en protesta, acusant-los de “vàndals” i “terroristes” per justificar la seva repressió. Tard o d’hora, els autors intel·lectuals i materials respondran davant els tribunals de justícia per aquests crims de lesa humanitat”.

Boularte va decretar el 14 de desembre l’Estat d’Emergència Nacional, buscant recuperar el control intern del país a través de les forces policials i les Forces Armades. Alhora, intentant frenar les mobilitzacions, que exigien eleccions immediates, anunciava l’avançament d’eleccions per a l’abril del 2024 i després per al desembre del 2023. La CGTP va respondre a aquesta declaració convocant una Jornada Nacional de Lluita per al dia 15, exigint el tancament del Congrés,  l’avançament de les eleccions per a l’any 2023 i la convocatòria d’una Assemblea Constituent.

Per la seva banda, els companys de Trabajo declaraven el 14 de desembre que és una necessitat materialitzar l’acord del 14 de maig de l’Assemblea Nacional dels Pobles, en el sentit que es convoqui una Trobada Nacional a Lima per l’Assemblea Constituent Sobirana. Aquest acord de la Trobada per l’Assemblea Constituent ha estat recentment aprovat, democràticament, per l’Assemblea Popular de Lambayeque, així com en el mateix sentit s’han pronunciat la CGTP de Huancayo, CGTP Chimbote, CGTP Lambayeque, FENTAP, i altres organitzacions representatives del país. És urgent fer passos pràctics per materialitzar aquesta orientació i sobre aquest escenari principal lluitar per la més àmplia centralització de les organitzacions en lluita per la solució de les seves reivindicacions”.

Cridem l’atenció sobre la forma que pren la mobilització dels treballadors i el poble peruà, tirant de formes d’organització, Fronts de defensa, Assemblees populars, que integren els sindicats i totes les organitzacions populars, és a dir, de treballadors, però també de pagesos, comerciants… que reprenen en aquest sentit les mobilitzacions dels anys 70 que van veure la constitució d’una Assemblea Popular Nacional, formes de fet de poder.

Organitzar la solidaritat

A l’Estat Espanyol, des del CATP s’han organitzat a finals del 2022 delegacions a l’ambaixada de la República de Perú i als consolats de Barcelona, Bilbao, Sevilla i València, en les quals han participat sindicalistes, membres del moviment pensionista i militants peruans residents a Espanya. En aquestes delegacions s’ha expressat el rebuig a la repressió i, des del respecte al dret del poble de Perú a decidir el seu futur sense ingerències externes, el suport a les reclamacions de la CGTP i les organitzacions populars de Perú.

El 3 de gener coneixíem una crida a la solidaritat internacional que signaven dirigents de la CGT i d’organitzacions populars del Perú.  Els militants peruans escriuen: “ens dirigim als nostres germans i organitzacions socials del món sencer per demanar-los la seva solidaritat amb les lluites del poble peruà sublevat des del 7 de desembre contra el cop parlamentari a Pedro Castillo, contra la instal·lació d’un govern de facto amb Dina Boluarte i la instauració d’un estat d’emergència amb toc de queda que ha posat el país sota el control de les forces armades i policials “, i assenyalen que “la lluita continua. Els representants sindicals i populars de les Regions del sud han acordat en una Assemblea Macro Regional reunida a Arequipa, realitzar una vaga indefinida a partir de demà 04 de gener. Igualment, a tot el país hi hauran mobilitzacions populars, la CGTP ha convocat una Assemblea Nacional de Delegats per determinar l’impuls d’una Aturada Nacional i existeix una crida des d’Arequipa per preparar una Marxa massiva de “los 4 Suyos” a Lima”. I conclouen amb aquesta petició: “Saludem les diverses expressions de solidaritat amb la lluita del nostre poble produïdes en diversos països com Espanya, Xile, Argentina i fem una crida a totes les organitzacions del món a multiplicar i intensificar aquesta solidaritat amb les lluites i el clamor de justícia, democràcia i sobirania del poble peruà”.

Creiem que, des d’arreu, cal respondre a aquesta crida, donar suport a les mobilitzacions que immigrants peruans i llatinoamericans estan organitzant a diverses ciutats de l’Estat, i aprovar resolucions d’instàncies sindicals i organitzacions populars en suport a la lluita del poble peruà i les demandes de les seves organitzacions.

El Parlamento Europeo, esa cueva de ladrones

Carta Semanal 920 en catalán

Carta Semanal 920 para descargar en PDF

Para elaborar esta carta, nos hemos basado en artículos publicados en el periódico de los compañeros griegos del NAR.
La Unión Europea da enormes poderes, por encima de los parlamentos y gobiernos nacionales, a instituciones que el pueblo no eligió y que no responden ante ningún pueblo, como la Comisión Europea y el Banco Central Europeo. Para intentar disimular este arreglo antidemocrático, existe el llamado “Parlamento Europeo”, elegido por los ciudadanos. Pero ese supuesto parlamento no es un verdadero órgano parlamentario, ya que no elige a la Comisión Europea, verdadero “gobierno” de la UE, ni tiene la potestad de controlar sus actos (Sobre el papel del Europarlamento, remitimos a nuestros lectores a nuestra Carta semanal 451). Sigue leyendo

El Parlament Europeu, aquesta cova de lladres

Carta Setmanal 920 per descarregar en PDF

Per elaborar aquesta carta, ens hem basat en articles publicats al diari dels companys grecs del NAR.

La Unió Europea dona enormes poders, per sobre dels parlaments i governs nacionals, a institucions que el poble no va triar i que no responen davant ningú, com la Comissió Europea i el Banc Central Europeu. Per intentar dissimular aquest arranjament antidemocràtic, hi ha l’anomenat “Parlament Europeu”, elegit pels ciutadans. Però aquest suposat parlament no és un veritable òrgan parlamentari, ja que no elegeix la Comissió Europea, veritable “govern” de la UE, ni té la potestat de controlar els seus actes (sobre el paper de l’Europarlament, remetem als nostres lectors a la nostra Carta Setmanal 451).

El regne dels lobbys

Ara, aquest europarlament és lloc d’un nou escàndol de corrupció, pel cobrament de comissions de Catar i altres països. Però, com assenyala el diari del NAR grec, “El Catar-Gate és només la punta de l’iceberg”.

Fins al 2010, el fenomen dels lobbys (en català, el cabildeig), habitual als Estats Units, on els expolítics eren “reciclats” a les empreses de cabildeig, era rar a Europa. Avui la UE no té res a envejar als EUA. El 30% dels que van ser comissaris europeus fins al 2014 ara “es guanyen el pa” en activitats similars.

Per als europeus “democràtics”, la profunda interconnexió dels lobbies amb els actors polítics/estatals als Estats Units es considerava una peculiaritat estatunidenca, fins i tot moralment reprensible. Però escàndols com el Catargate ens recorden que el suposat “bastió de la democràcia europea”, el Parlament Europeu, és un escenari privilegiat per a l’actuació de lobbies.  Segons el Corriere della Sera, hi ha almenys 13.000 empreses amb al voltant de 48.000 persones a Brussel·les i l’organització Transparència Internacional de la UE informa que almenys 7.500 “cabilders” estan actius al Parlament Europeu. És clar que ha arribat el moment de deixar caure les màscares.

Les suposades “normes de transparència” presentades el gener del 2019 només obligaven els presidents i ponents a anunciar les seves reunions amb els grups d’interès, i només si aquestes reunions es referien a una qüestió legislativa específica de la qual són responsables. En tots els altres casos, és potestat dels eurodiputats anunciar si s’han reunit amb un grup de pressió i quantes vegades. El resultat? Des del 2019, només el 48% dels eurodiputats han acceptat publicar les seves reunions amb grups de pressió, tot i que superen les 12.000.

Ara, el Parlament Europeu i la Comissió prometen canvis. Però durant tants anys han “picat l’ull” als grans interessos.

Els grups de pressió estan inextricablement vinculats al caràcter de la UE del capital, i, ja que aquest caràcter no canviarà, els grups de pressió no deixaran d’ existir.

El Catargate no és el començament, ni se sap per què “va sorprendre” alguns!

La història dels escàndols (més o menys recents), no hauria d’haver estat tan fàcilment oblidada.

El 2011, Adrian Everin, de Romania, vicepresident del Partit Socialista, Zoran Tuller, d’Eslovènia, membre del mateix grup, i Ernst Strasser, del Partit Popular Europeu d’Àustria, van ser caçats acceptant suborns de periodistes del Sunday Times que es feien passar per lobistes per defensar certes esmenes legislatives.  Aquest estiu, l’escàndol d’Uber (documents filtrats demostren que aquesta empresa feia lobby amb governs per ajudar a la seva expansió, trobant, per exemple, a Emmanuel Macron, ministre d’Economia entre el 2014 i el 2016, a un aliat a França), va posar en relleu la facilitat amb què els lobbies –el món empresarial en aquest cas– van accedir als nivells institucionals més alts de la UE.

Tot i que el cas està tot i ser investigat, recordem la tempesta d’acusacions contra Nelly Cruz, llavors Comissària Europea de Política Digital, i les més de cent reunions d’Uber amb funcionaris públics, inclosos molts representants de les institucions europees. Però si l’anterior és el costat “il·legal” dels lobbies dins del Parlament Europeu, és interessant aturar-se al costat “legal”. Ja el 2006, acadèmics i organitzacions van donar la veu d’alarma sobre la creixent presència de grups de pressió al Parlament Europeu. Com més absorbia la UE les competències dels Estats membres i obtenia més poders, més atractiva resultava per als grups d’interès. Amb el pretext que el Parlament Europeu és responsable d’adoptar propostes legislatives que tinguin en compte les especificitats de cada Estat membre, la qual cosa requereix el màxim accés a la informació, s’ha convidat els grups d’interès a assistir i participar en qualsevol tipus de comissió parlamentària amb competència d’especialistes. Els “dinars” i altres reunions entre grups de pressió i eurodiputats formen part de l’agenda diària. Transparència Internacional UE va registrar, només per a l’any 2014-2015, 7.084 reunions de funcionaris de la Comissió (no del Parlament Europeu), el 75% de les quals van ser amb representants de les empreses i la indústria. Almenys 25.000 grups de pressió s’ocupen exclusivament de qüestions europees, amb una despesa d’almenys 1.500 milions d’euros. Sense esmentar la quantitat de reunions que no es registren.

Tras esclatar el Catargate, el Parlament Europeu es va comprometre a endurir la seva posició respecte a qui té accés als seus locals i reunions entre polítics i grups de pressió. Però, hi ha alguna persona raonable que pugui creure que una estructura tan podrida pot canviar, encara que sigui una mica?

Anem al Catargate

El PASOK, l’Eurogrup socialdemòcrata, al qual pertanyen les persones afectades, i la UE en el seu conjunt es veuen exposats pels esdeveniments que van seguir a la detenció de l’eurodiputada grega Eva Kaili i altres tres persones com a membres d’una organització criminal.

Però no es tracta d’unes poques “pomes podrides”, tot el barril està podrit. Més enllà dels “atrapats in fraganti”, es revela al mateix Parlament Europeu com a regne de la corrupció.

Segons les autoritats belgues, es tracta d’un grup de persones amb posicions polítiques i estratègiques al Parlament Europeu a les quals se’ls han pagat grans sumes de diners o han rebut regals substancials per influir en les decisions del Parlament Europeu a favor de Catar i altres països.

I tot i que tot indica que les arrels de la corrupció s’estenen a Brussel·les i a les institucions de la UE, queda per veure si les revelacions prendran la forma d’una allau o hi haurà un intent de sacrificar algunes “pomes podrides” (els cinc eurodiputats amb els quals l’exeurodiputat Panzeri, centre de la trama, va tenir contactes),  per salvar el barril. Ja la cimera de dijous dels “27” va declarar que “no és el seu problema” i que la qüestió només concerneix el Parlament Europeu i el funcionament de la UE en el seu conjunt.

Com va declarar un funcionari al diari Polític: “Serem informats per la presidenta del Parlament Europeu, Roberta Metsola, però no anirem més enllà sobre l’assumpte”.

La història té tints de pel·lícula de mafiosos. Eva Kaili rep un sotrac sobre l’arrest de la seva parella, Francesco Giorgi.  En ple pànic, va anaral seu pare perquè busqués la maleta amb els diners i sortís de l’hotel.  Però les autoritats belgues intercepten el pare i descobreixen gairebé 600.000 euros a la maleta, cosa que permet anul·lar la immunitat de Kaili, registrant la seva residència i altres 15 cases i oficines a Brussel·les i els seus voltants, i incautant un total de més d’1,5 milions d’euros en efectiu.

El grup de treball belga contra la corrupció es va declarar sorprès pel que va veure a la casa de l’eurodiputada del PASOK el divendres 9 de desembre. La casa estava plena de bosses de diners i altres objectes de valor i moblada amb costosos regals de Catar.  “En general, fem aquests descobriments durant les recerques de narcotraficants”, va dir un membre de l’equip d’investigació a Le Soir. “Lluita contra la impunitat” és el nom de l’ONG fundada per Antonio Panzeri, el “cervell”, al parer, d’una xarxa de corrupció en la qual Eva Kaili, la seva parella Francesco Giorgi i altres eurodiputats, empleats i funcionaris semblen haver exercit un paper principal.

La mateixa Eva Kaili sembla voler “vendre cara” la seva pell, declarant a través del seu advocat que “no acceptarà convertir-se en una altra Ifigènia” mentre rebutja tota responsabilitat sobre els diners de la seva parella. També va fer constar que el desenvolupament de relacions especials amb Catar, Kuwait i Omán va ser una línia política central de la UE.[1]

“Estem commocionats”, deia la declaració del Grup Socialista del Parlament Europeu. “Estic commocionat. No només estic sorprès, ‘he caigut dels núvols'”, va dir Andreas Loverdos, un amic polític d’E. Kaili, dins del PASOK. Però, és aquest el cas? Si no hagués estat arrestada “in fraganti”, atrapada amb les mans a la massa, les mateixes persones probablement parlarien d’una “conspiració” amb motius polítics, com va succeir en l’escàndol Novartis. Nikos Androulakis, dirigent del PASOK, es va apressar a expulsar Eva Kaili del seu partit, però no va mostrar la mateixa sensibilitat després de les provocadores referències d’aquesta última a favor de Catar en un discurs davant el Parlament Europeu cridant al país un “pioner en drets laborals”.  mentre que milers de treballadors han mort en els últims anys en condicions inhumanes. Una actuació que ja havia suscitat interrogants i sospites sobre la profunditat de les seves relacions amb els Emirats Àrabs.

Com hem assenyalat, no és l’única diputada al Parlament Europeu que ha fet referències massa elogioses a Catar. És difícil creure que tots els altres eurodiputats serien “tontos útils” i donarien suport a Catar a canvi de res.  

Així funciona la Unió Europea, que pretén imposar retallades de pensions al govern espanyol.

Per la unió lliure de pobles d’ Europa

La corrupció generalitzada que recorre les institucions de la UE, al cap i a la fi, és l’expressió normal del funcionament del sistema capitalista. Amb un agreujant: aquestes institucions no responen davant de cap poble. Només obeeixen al capital financer, en les seves múltiples formes.  I a això pretenen anomenar-lo Europa.

Els pobles i nacions d’Europa necessiten un pla comú, però això és contradictori amb els interessos del capital; les institucions europees són aquí per pressionar els governs per tirar endavant el qui exigeix el capital. Per exemple, és coneguda la pressió de Brussel·les perquè es desmantelli el sistema públic de les pensions, entre altres qüestions del mateix calat.

Davant d’això els pobles d’Europa necessiten una Unió Lliure de nacions i pobles alliberats d’opressió i l’explotació.

 

 

[1] Segons la mitologia, Ifigenia va ser sacrificada pel seu pare, Agamenón, per aplacar els déus que retenien el vent que havia d’impulsar les naus gregues cap a Troia.