(Publicado en la Carta Semanal 576)
A todos los efectos, excepto el estrictamente legal, la campaña electoral ha comenzado. Y muchos trabajadores y jóvenes, decepcionados por la ocasión perdida de formar un gobierno de izquierdas (es decir, un gobierno que diera respuesta a las exigencias y reivindicaciones de la clase trabajadora, la juventud y los pueblos) se preguntan si merece la pena volver a votar, y es posible que haya sectores de trabajadores y de jóvenes que no voten porque piensan que las elecciones no son la vía para satisfacer las reivindicaciones. Otros muchos van a votar al PSOE por fidelidad a este partido y para acabar con la era Rajoy. Para otros, la presentación de la coalición Podemos-IU abre nuevas esperanzas. Otros, finalmente, van a optar por formaciones “nacionalistas” por rechazo a los recortes impuestos desde Madrid y para defender los derechos de los pueblos, aplastados en el “Estado de las Autonomías”.