(publicado en la Carta Semanal 516)
Las elecciones andaluzas primero y las inminentes elecciones municipales y regionales parecen haber sumido a todos los partidos y organizaciones, también a las que se basan en la clase trabajadora y en la juventud, en una verdadera fiebre electoral. Todos pretenden convencernos de que el único cambio posible en este país va a venir de la mano de los resultados electorales.






